viernes, 12 de diciembre de 2014

FELIZ DÍA LUCÍA!!!




 Mi hada de alas transparentes que revolotea de un sitio para otro espolvoreando con pigmentos de color el sendero a seguir.
Luciérnaga que alumbra en la noche, estrella que ilumina el día.
Manantial de agua pura que con suave música regala nuestros oídos.
Aroma de tierra recién bendecida por la lluvia.
Rocío en la mañana, nube de algodón danzando en un cielo azul.
Arena cálida que invita al descanso.
El mejor amanecer, la más bella puesta de sol.
Mi margarita y no la del Cocciante.
Mi niña soñada y soñadora de imaginación desbordante que inunda los sentidos, bendita inundación!.
Duele no tener palabras para describir todo lo que fluye dentro, aunque duela no tener tiempo para expresarlo, aparcando todo por temporadas y seguir en este mundo de prisas... La vida duele maravillosamente porque estamos vivos!!!.
Ya lo decía una persona muy sabia y querida por todos nosotros (mi padre,tu abuelo ).

Feliz día Lucía, el mejor y más bello de los nombres para la mejor y más bella persona!







     

viernes, 14 de noviembre de 2014

LA TÍA JULIA Y EL ESCRIBIDOR


Una sátira exquisita de la literatura rosa y de la novela popular que tanto éxito ha tenido en los países de habla hispana, al tiempo que cuestiona la hipocresía, el racismo y el clasismo de la sociedad limeña de la época, con la maestría a la que ya nos tiene acostumbrados.
Ya en el título de esta novela de Mario Vargas Llosa, publicada en 1977, se recoge la doble historia en que se vertebra su argumento: por un lado, la relación amorosa del joven escritor Varguitas con una mujer de su familia mayor que él, la tía Julia; y por otro, la desaforada presencia del folletinista Pedro Camacho en la misma emisora de radio donde Varguitas trabaja.
La noble pasión amorosa entre la tía Julia y el aprendiz de novelista, que la sociedad limeña de los años cincuenta trata por todos los medios de impedir, se combina en esta novela de Vargas Llosa con las narraciones truculentas del folletinista de las ondas. El contrapunto de una encendida pasión con aires shakesperianos y su correlato melodramático y la inesperada confluencia del devoto de la alta literatura y el escribidor rastrero son algunas claves de esta narración mayor de Mario Vargas Llosa.
La tía Julia y el escribidor (1977) reúne el interés de los relatos de aventuras, donde la atención del lector queda sujeta a un final feliz continuamente postergado, y el más desternillante y grotesco pasatiempo, gracias sin duda a las divertidas aportaciones del escribidor Camacho, uno de los grandes personajes del novelista peruano.

martes, 14 de octubre de 2014

FELICIDADES CONCHI!!!

Ya estamos aquí de nuevo, ahora es el turno de mi Marieta, toca refrescar la mente y rebuscar recuerdos, intentaré que el protagonista principal sea el padre de la criatura, o sea mi hermano mayor.
Sabes? siempre me recuerdas a tu padre de pequeño en cuanto a travesuras se refiere, lo restante es mio ( la que escribe se lleva la mejor parte, por eso es mi relato jajaja).
Mis hermanos y yo siempre tuvimos conciencia de lo afortunados que eramos, por el simple hecho de disfrutar de unos padres y abuelas maravillosos! De una casa enorme en la que poder hacer casi de todo. Siempre he dicho que los juegos con agua eran nuestros favoritos y protagonistas en casi todas nuestras mejores travesuras, mangerazos, deslizamientos por el suelo del patio con el desagüe taponado, baños en un bidón de latón ( qué no veas para salir y entrar) o en un “caldero” puesto a sol unas horas antes. Nuestra primera piscina fue hinchable y de tres altura, causa de numerosos mareos al llenarla a pulmón limpio cuando perdimos la bomba y que acabó toda llena de parches. Un día nos despertamos con una pequeña piscina de las de verdad, de ladrillos, no puedo recordar el día a día de la construcción, tal vez imagino que serian tantos, que nuestra impaciencia acabaría por desequilibrar al más equilibrado, ni tampoco recuerdo nuestro primer baño, es como si hubiese estado allí en el huerto toda la vida, lo que si recuerdo perfectamente son a mis hermanos y a mi con los labios morados por el frío, casi a oscuras y mi abuela con las toallas, suplicando qué saliésemos ya de una vez, y nosotros al unísono “ un ratito más”finalmente hacían acto de presencia mis padres y salíamos uno tras otro, arrugados y sin rechistar.
Teníamos una colección de flotadores y artilugios para jugar en el agua, aunque he de decir que la piscina no nos cubría ni por el lado más profundo, ni tampoco es que fuese muy grande, tenia la medida y profundidad justa para que los más pequeños no corriesen demasiado peligro, eso no quita que diésemos algún que otro susto a nuestros mayores.
Una tarde, creo recordar que por algún cumpleaños, nos sorprendió mi padre con una canoa hinchable, la cual fue recibida por nuestra parte con gritos y saltos de alegría, una vez bien llena de aire, decidimos que los primeros en subir fuesen los pequeños acompañados de un hermano mayor, el hermano restante sería el encargado de mover la canoa desde el borde de la piscina, a mi me tocó subir a la canoa de acompañante y cuidadora de los pequeños y mi hermano mayor sería el gondolero, por lo que se hizo de un palo con lo que poder arrastrarnos por el agua.
Allí estaba toda la familia al pleno preparando el acontecimiento, la canoa en el agua, mis hermanos pequeños ya subidos esperando mi turno, he de decir que subir a la embarcación no fue fácil, casi originé un naufragio al intentar acomodarme, sobraban extremidades y faltaba espacio.
Mis padres y abuela aplaudían animándonos a partir, mis hermanos y yo saludábamos nerviosos a la espera del largo crucero por los mares del sur, mi hermano mayor (el gondolero) nos amenazaba con fabricar olas gigantescas nuestro viaje comenzó, con el palo nos empujó y oímos un chasquido y la embarcación empezó a hacer aguas y hundirse con tripulación incluida, antes de perderme bajo el agua enredada en brazos y piernas de mis hermanos, pude distinguir la cara de asombro del gondolero y una mezcla de enfado y susto en las de mis padres.
Aunque rescatados del fondo de los océanos, no nos libramos de la reprimenda de mis padres, que nos reprochaban una y otra vez el que no fuésemos más cuidadosos con nuestras cosas, he de decir en nuestra defensa que la culpa no fue nuestra, sino del palo que escondía una puntilla traicionera causante de nuestra desdicha, ya que no hubo manera de arreglar tamaña avería. Lloramos no ya la canoa, sino el hecho de las innumerables aventuras no vividas, aunque las remplazamos con creces, no se nos resistía nada de nada!!, ya he comentado en numerosas ocasiones que estábamos “asalvajaos”, pero el recuerdo de la canoa moribunda aunque reluciente nos acompañó durante mucho tiempo, mis padres relataban lo sucedido una y otra vez a toda visita de las numerosas que a lo largo de nuestra infancia pasaron por nuestra casa para compartir un trocito de nuestras vidas e historias, que las hay y a montones. Que sigan apareciendo en este espacio es y será mi reto a seguir, que mis hermanos se vean identificados en ellas, lo que pretendo, que sucediese todo tal y como lo narro? Por supuestiiiiiiisimo mi desbordante imaginación así lo recuerda.



Bueno Marieta, otro año más disfrutando de tu presencia, de tu desparpajo, de tu saber estar en la vida, mi niña linda!! mi casi ingeniera!! mi rubia de sonrisa perfecta, espero que seas muy feliz, pues lo de conseguir retos, lo de luchadora, trabajadora, eso fijo que si!!. un millón de millones de besos de tu tita ( a la que te pareces tanto).

viernes, 29 de agosto de 2014

FELICIDADES SHAILA!!!


Aquí otra vez, cumpleaños en puerta, mis musas de vacaciones.
De ahora en adelante mi «relato cumpleañero» será uno de los innumerables episodios vividos por mis hermanos y yo en nuestra ya lejana etapa de críos «asalvajaos o cafres».
Circulaban leyendas sobre nosotros (casi todas ciertas) como la de apagar y encender la luz con los pies, la del sofá nuevo cortado con una cuchilla de afeitar (para ver su interior) la del  gato encerrado en el frigorífico, la del hermano pequeño  perdido por mí en la playa... poco a poco las iré narrando en este espacio.
Controlarnos,  «misión imposible» siempre había uno de nosotros desperdigados por ahí, mi abuela  nunca desistía de la tarea de  reunir a sus polluelos.
Casi todos mis recuerdos, o al menos los mejores, transcurren en verano, en otoño e invierno el colegio con sus montañas de deberes nos mantenían ocupados.
Vivíamos bastante lejos del cole, por lo que mi hermana y yo madrugábamos  para intentar llegar puntuales, casi nunca lo conseguíamos, todas las mañanas tocaba correr, correr y correr, como hermana mayor (entonces más alta) al peso de la mochila se le añadía el de la cesta con platos, vasos, cubiertos, cacerola... las gentes se apartaban al paso de la «niña orquesta» que con la mano libre, tiraba de mi rezagada hermana pequeña la cual buscaba la menor excusa para aminorar la marcha, por si había suerte y encontrábamos la cancela del cole cerrada.
Si los viajes de ida eran una odisea, los de vuelta ni que contar, cansadas, despeinadas, llenas de «churretes» algún que otro moratón o arañazo y vuelta a correr para alcanzar el Bus, la mayoría de las veces se perdía en el horizonte. Tocaba paradita en el barrio San José para reponer fuerzas  bebiendo agua de su fuente, un interminable camino nos aguardaba lleno de sorpresas y ameno a más no poder! no importa qué ruta se eligiese en las dos posibles nos encontrábamos con el paso a nivel (primero con cadenas, mas tarde con barrera) siempre echado a la espera del tren de turno, si tocaba un mercancías se aprovechaba para jugar a las «palmitas», otros pasaban tan rápido que las trenzas y los uniformes bailaban al compás del aire, sus pitidos nos entraban por los oídos para acampar a sus anchas en nuestro estómago y hacernos saltar como posesas. Ya, más tranquilas, de nuevo cargadas de bártulos emprendíamos la marcha hacía el hogar. Cada recodo del camino tenía su historia, su luz, su olor... que nos envolvía y nos transportaba a lugares lejanos donde dejar volar la imaginación.
Ya en casa con los nuestros, tocaba narrar acontecimientos adornados y exagerados al máximo, para asombro de nuestra «crédula» abuela y risas y guiños de nuestros  padres y hermanos. La merienda, los deberes (que casi nunca terminábamos) el baño, la cena, tocaba ir a dormir, entonces llegaba lo mejor, jugábamos a los espías, nuestro acometido era llegar hasta el comedor donde estaban nuestros mayores viendo la tele, sin ser vistos ni oídos, por lo que nos arrastrábamos por el suelo cuchicheando y sorteando toda tipo de objetos, un hermano  detrás de otro a veces se nos sumaba hasta nuestro gato Gaspar,  sí nuestras risas nos traicionaban y  acababan por descubrirnos nos mandaban  a la cama de nuevo, otras veces alguno de nosotros acabó dormido en su puesto de centinela por puro aburrimiento jaja.

 
Bueno Shaila  he puesto mis neuronas a trabajar para poder llegar con mi relato a tiempo.
Por ti esto y mucho más, eres un amor de persona!!, mi Shay, mi sobrina pequeña,(debe ser genes de familia qué las pequeñas siempre son más altas que las mayores). Seguro que este año va a traerte montones de cosas y todas muy buenas, se muy feliz, un beso superfuerte de tu tita la  aventurera!!

P.D. Aunque sigas cumpliendo años no olvides nunca la niña que hay en tí!!

sábado, 12 de julio de 2014

CANTAR DE CIEGOS

Con Cantar de ciegos, Carlos Fuentes reafirmó su lugar no sólo como novelista esencial del boom, sino también como un excelente cuentista. Los relatos de este libro son muestras, disecciones sobre un ácido y también decadente provincianismo y las desintegraciones posibles del hombre en la Ciudad de México, narrados por un orfebre del lenguaje como lo es Carlos Fuentes. Son cuentos donde la inocencia perdida se busca con el afán de restituirla. Textos como “Las dos Elenas”, “La muñeca reina” y el resto del libro son ya parte del universo literario del escritor mexicano y, de paso, parte del universo que compone la literatura mexicana del siglo xx.

sábado, 3 de mayo de 2014

FELICIDADES LUCÍA!!





Feliz cumple Lucía!!
Un año más felicitarte desde aquí. la verdad es que mis musas andan perdidas por los incontables rincones de mi cabeza, nadie mejor que tú para entenderlo.
Voy a poner mi corazón en cada una de las palabras que escriba en este relato qué aún no se como dirigir, posiblemente será breve, debido en parte a nuestras
innumerables charlas en las que todo o casi todo se ha dicho ya, en este «peazo» de año, por llamarlo de algún modo « de transición» en el que Lucy de pelo rojo da paso a orugilla roja y esta a su vez a Lucía, una de  la mejor  y más linda persona con la que  me he cruzado en esta vida y que tengo la inmensa suerte de que además sea mi hija, la mejor y más divertida amiga qué siempre consigue hacerme reír. «Ojú» la de horas de sueño que hemos perdido o ganado según se mire, charla que te charla, con las dos lunas de testigo, en nuestro sofá favorito, compañero mudo de tantos y tantos momentos de risas y más risas, de algún que otro llanto, de horas de siesta, de acurrucarnos juntas para disfrutar de una buena peli o de algún que otro dramón a la española que no lo entiende ni el que lo escribió, Vaya par de «sensimbleras».
Mi Lucy con su peculiar forma de ver y sentir la  vida contemplando todo como por vez primera! lejos de ser un defecto es la más preciada de las virtudes.
Qué nada ni nadie  te cambie!!. De los cientos de senderos qué se abren frente a ti, tengo plena seguridad que cualquiera de ellos te llevará a buen puerto en este largo recorrido. Lo importante no es elegir si no la persona qué elige y como ser humano eres lo mejor de lo mejor, y es lo qué cuenta, el tiempo dirá. No «regines» tanto.
         
                          Elobion mamá!!

jueves, 24 de abril de 2014

LA ESCAFANDRA Y LA MARIPOSA


Era 8 de Diciembre de 1995 cuando Jean Dominique Bauby, con 43 años, sufría un accidente cerebrovascular mientras conducía su coche por las calles de París. Jean Dominique era conocido por su labor como periodista y aún más por ser el editor de la revista de moda francesa Elle. Aquel accidente cambiaría por completo su vida. Despertó un día, tras un largo tiempo en coma, rodeado de todo el material hospitalario posible, cables, monitores... y personal médico alerta de su situación. Comenzaba el encierro. EL SÍNDROME DEL CAUTIVERIO O PSEUDOCOMA Jean Dominique había sido diagnosticado de un síndrome clínico complejo y poco frecuente, se trataba de un cuadro completo de tetraplejía y pérdida de la capacidad de articular el lenguaje (anartria) manteniendo intacto el nivel de conciencia y las funciones cerebrales superiores. - 

miércoles, 16 de abril de 2014

PEQUEÑO TEATRO (ANA MARIA MATUTE)

Teatro de títeres: humildes muñecos movidos por la destreza de un anciano bondadoso... Pero seres humanos también, seres humanos que palpitan y bullen en la ciudad, dejando al descubierto sus propias miserias, sus inclinaciones, sus torpes sentimientos, sus mezquindades, sus odios, sus reacciones... En torno a un adolescente desamparado, agítanse las pasiones de seres cuyas ruindades - fantochadas, hipocresía, ambición, crueldad, sueños engañosos - adquieren, a lo largo de la narración y por la lograda delimitación de los personajes, caracteres de símbolos, aunque sin perder en ningún momento su condición humana. Un hálito poético, como corresponde a la fina sensibilidad de la autora, anima todas las páginas de esta interesante novela, galardonada con el Premio Planeta 1954.

miércoles, 5 de febrero de 2014

FELIZ CUMPLEAÑOS PAPÁ



   Hola papá, de nuevo aquí abriendo mi corazón y mi alma por ti, la única forma de comunicación entre tú y yo, con lo que nos gustaba charlar y charlar a los dos!.
Se acerca tu cumpleaños y casualidades de la vida, al ser también el de tu nieto (mi hijo) nunca se me olvida ni se me olvidará. Se pasó de una mera felicitación ese día a una celebración en toda regla y por partida doble.
Ahora años más tarde, para nosotros, tu familia, sigue siendo el cumple de mi padre y de tu nieto.
Papá, nunca hubo palabra más bella ni sonido más hermoso!. Ahora me conformo con escribirla una y cien veces para llenar el vacío que tu marcha dejó en nuestras vidas. No me canso de llenar páginas y páginas  hablando de ti, no sé ni cuantas veces he escrito lo buen padre qué eras y no digamos abuelo, pero aunque me reconforta hacerlo, la herida por  tu ausencia no deja de dolerme muy adentro, en «las entrañas» cómo decimos por aquí, vivir sin tu persona es muy duro, durísimo, afortunadamente tengo millones de bellos recuerdos pululando a mi alrededor.
Un año más, desde aquí, porque no tengo otra forma de dar las  gracias a mi padre por su generosidad y saber estar en la vida, por el amor a raudales, sin dosificar que emanaba de su bella persona, por todo su ser cálido y sereno que nos regalaba a diario raciones de paz y sabiduría, por tantos y tantos momentos vividos junto a ti, sin imaginar qué algún día nos dejarías para siempre.
Mi mochila quedó bien llena con todo lo que sabías que necesitaría en todos estos años de ausencia, ni un solo día de mi vida pasa sin qué la vacie por completo, ordenando, repasando, volviendo a ordenar y repasar, apretándola fuerte contra mi corazón. Rescatar de algún rincón de mi memoria tu sonrisa, agudizar mis sentidos hasta percibir tu aroma, el sonido de tu voz... soñar contigo el mejor de los regalos!!
Un año más como siempre desde aquí, agradecer qué compartieras con nosotros, tu familia, tu paso por la vida, qué nos guiaras y marcaras con trocitos de amor la senda a seguir.
Estas lineas sustituyen el fuerte abrazo que ya nunca más te daré, la conversación  pendiente, el beso aplazado, tantas y tantas cosas y tantos y tantos momentos...
Por eso me cuesta terminar de escribir para «guardar como cumple de mi padre» en algunas de las cientos de carpetas almacenadas en mi memoria y ahora en este espacio creado para dar salida  a las cosas que nunca te dije, me consuela pensar que de algún modo, mis palabras llegan hasta ti, al menos  escribirlas alivian mi alma.
Un fuerte abrazo papá, hasta pronto.

martes, 4 de febrero de 2014

FELIZ CUMPLEAÑOS RAFA


Plasmar en un relato lo especial qué eres para mi sin sensiblerías, no es nada fácil.
Rafa, mi primer hijo con el que comenzó mi aprendizaje como madre. Imposible describir lo que sentí al verte y estrecharte  entre mis brazos por vez primera. En ese instante comprendí que para bien o para mal ya no sería la misma persona.
Desde entonces hasta ahora ha llovido mucho, aunque recuerde cada detalle de cada  día a tu lado como si fuese ayer mismo (será qué mis neuronas no se han separado lo suficiente, ni quiero jaja)   gracias a ti cuento con este  espacio y con otros más  que me permiten  plasmar una  parte de todo  el «rebujo» que llevo dentro, esperemos que no se me ocurra algún día «pinchar sin leer»  y se borre todo ( no sería la primera vez).
Así que otra vez y desde aquí, vuelvo a felicitarte  en tu cumpleaños, decirte qué eres uno de los mejores regalos que me ha hecho la vida, no me canso ni me cansaré de agradecer tu llegada un día de febrero, de repetir todas las veces que haga falta lo feliz que estoy de ser tu madre y haber compartido y de compartir tantos momentos contigo. Quisiera  regalarte  todo lo mejor de este mundo, sin dosificar, «a puñaos» y como te dije en una ocasión, ya muy lejana, « todo es posible en el país de la fantasía» .
 Feliz cumpleaños y besos infinitos!!        

martes, 21 de enero de 2014

FELIZ CUMPLE BIENVE!!!


Ya me dirás cómo empiezo este relato con los cuatro que te escribí el pasado cumpleaños. Podría pensarse que el repertorio está ya agotado, pero no, con mi Bienve no!!.
 Mi hermanita pequeña a la que esperé que creciera para compartir primero juegos,luego inquietudes, confidencias, aventuras y desventuras...
 He aprendido tanto de ti cómo tú de mi, somos la cara y la cruz de una misma moneda, inseparables e indivisibles. Cada una aporta a la otra lo preciso y necesario, ojú si nos fundiesen en un sola seríamos la «mujer perfecta» jajaja.
 Mi Bienve tan linda cómo siempre, descumpliendo años, qué coraje!! ya va siendo hora de que seas tú la graciosa y yo la guapa.
 De pequeñas teníamos un par de muñecas iguales con la única diferencia del pelo, que mira por donde a mi me tocó la pelirroja y a ti la rubia, lo contenta que te ponías cuando la vecina te decía que la tuya era más bonita y luego me guiñaba el ojo a mi sin que tú la vieras, anda que vaya par!!.
 La de juegos qué ideábamos! porque entonces pienso que los días tenían más de 24 horas y nos sobraba tiempo para deambular a nuestro aire por donde fuese en una casa enorme con montones de rincones que descubrir y en los que jugar, con dos hermanos más para sumar travesura tras travesura y con unos padres y abuela que eran unos benditos al cuidado de cuatro «cafres» cómo solían decir. Nuestro ángel de la guarda estaría agotado sobre todo contigo que no salías de una cuando te metías en otra, la clavícula partida por tres veces, te atropelló una moto, te caíste rodando por una cantera, te intoxicaste con el brasero, te metiste un garbanzo en la nariz, te tragaste una aguja de coser, bebiste un trago de aguarrás...
 Mi Bienve que siempre me hace reír a carcajadas con sus ocurrencias y despistes, mi payasita linda, requetelinda (aunque me de coraje) heredera de al menos un síntoma  de todas las enfermedades habidas en nuestro árbol genealógico. «Pachorruda» como decía mi abuela Edida, apuntándose a todo y no acabando nada jajaja, con un extenso repertorio de las más variadas recetas culinarias, jamás repite ingredientes, cada vez que le preguntes te lo explicará de forma diferente, así de  especial para todo, improvisando constantemente, la mejor hermana del mundo mundial!!  con la que puedo contar siempre para todo, a su lado el día a día podrá ser de todo menos aburrido, puedo dar fe de ello. Hasta el próximo relato...
 Felicidades hermanita pequeña más alta que yo!!