Una casa heredada, un árbol y muchos recuerdos
Tras la muerte de Bertha, sus tres hijas Inga, Harriet y Christa y su
nieta Iris, se reencuentran para leer su testamento. Para sorpresa de
todas, Iris es la heredera única de la casa y debe decidir en pocos días
qué hacer con ella. Como primer paso, comienza por poner orden en las
pertenencias de su abuela.
A medida que va redescubriendo las habitaciones y los rincones del
maravilloso jardín que rodea a la casa, Iris reconstruye la historia,
tierna y amarga como el sabor de las pepitas de manzana, de tres
generaciones de mujeres: su abuela Bertha, que perdió la memoria tras
caerse del manzano del jardín; su madre Christa, quien se trasladó al
sur del país cuando se casó, manteniéndose alejada de su familia; su tía
Inga, la más bella de las tres hermanas, fotógrafa de profesión, que se
ha recorrido el mundo, y Harriet, la menor, a quien la muerte de una
hija cambió para siempre. Iris descubre secretos familiares y busca
respuestas a los enigmas de su pasado. ¿Quiénes fueron los grandes
amores de sus tías? ¿Qué secreto guardaba su excéntrica abuela? ¿Y qué
ocurrió realmente en la noche del accidente de su prima?